Descripción
A través de las imágenes de la herida y la herida de las imágenes, Iáñez y Padín tratan de dar luz a las nuevas posibilidades de vida de la fotografía, a su poder para generar nuevos paisajes de lo (im)posible que asuman la potencia de sus fisuras y el eco de sus lamentos: la necesidad de bucear las heridas y ofrecerlas entreabiertas, a contracorriente de la tempestad.