Descripción
En 1955, Henri Cartier-Bresson publicó “The Europeans”, una colección de fotografías tomadas a lo largo de cinco años. Su retrato del continente documentó un paisaje ensombrecido por la guerra, donde la gente vivía entre ruinas y aún llevaba la marca del hambre.
Para este libro, publicado por primera vez cuarenta y cinco años después, el célebre fotógrafo reunió un rango mucho más amplio de imágenes, que abarcan desde finales de la década de 1920 hasta principios de la de 1990. Cartier-Bresson viajó por toda Europa, desde el escudo escandinavo hasta el kárstico balcánico, desde los granitos bretones hasta los pantanos irlandeses, con el fin de capturar lo que significa ser europeo. Más allá del nacionalismo y de las características particulares de cada cultura y nación, encontró evidencia de una identidad mayor, un parecido familiar compartido por la gente y el paisaje.
Los europeos aquí registrados habitan tanto la ciudad como el campo, donde los vemos trabajando, en las calles, viajando y charlando. A veces son figuras solitarias; una fotografía puede mostrar solo una mirada, un destello de un rostro. Sin embargo, a menudo, Cartier-Bresson dirige su cámara a parejas, figuras gemelas, individuos reflejados, soledades entrelazadas. Captura multitudes, reuniéndose tanto para celebrar como para protestar. Unificados por la claridad y la compasión de su visión, las fotografías de Cartier-Bresson hablan de la misma ceremonia diaria, del negocio continuo de vivir para la gente de toda Europa, ya sean sacerdotes polacos en alba o sotana, o campesinos abruzzos envueltos en el negro de sus abrigos y sombreros.
Con su notable habilidad para capturar la frágil realidad de la vida europea, Henri Cartier-Bresson subraya su reputación como uno de los fotógrafos más influyentes y originales del siglo XX.